Finalmente llegamos a Tioman, tras varias horas de bus nocturno que nos dejo a las 4 de la mañana en el pueblo donde se coge el ferry. Tuvimos que caminar en modo zombie durante un buen rato para encontrar el puerto. El primer barco salía a las 9 así que intentamos dormir algo. 2 horas de barco cruzando por varias islas y finalmente Tioman. La isla es bastante grande, varias montañas altas, paredes de piedra, jungla intensa, ríos y cascadas, y la permanente agua turquesa del mar. Me recuerda a la isla de la película de Jurassic Park. Llegamos al puerto y al parecer nuestro hotel esta en una playa aislada donde no va el ferry. Esperamos en el puerto preguntando a barqueros y finalmente un chaval nos lleva. En esta isla los precios son sin impuestos y por ejemplo el alcohol es sustancialmente mas barato que en el resto de Malasia. Pero parece ser que los hoteles no se han enterado todavía y siguen con precios bastante altos. El hotel donde nos quedamos tiene varias cabañas que podrían haber sido diseñadas y fabricadas por un cromañon, aunque la situación prácticamente sobre el agua es insuperable. Bueno, de hecho el dueño es un chaval rasta que no se estresa por nada ni nadie. El resto de la staff se compone de un cocinero indio que cocina lo que le parece, ya que no tienen ni carta, y el hermano del rastas que es una mezcla entre pillao de la ruta del bacalao con un pirata del Caribe, pero sin dientes. Una plantilla digna de una película de los Hermanos Marx. El primer día nos agobiamos un poco porque estábamos totalmente incomunicados, sin teléfono ni internet y con precios abusibos si querías coger una barca. Pero al cabo de un par de dias de no hacer absolutamente nada, nos hemos acostumbrado y nos lo pasamos incluso bien. En estos dias hemos leído, buceado, tomado el sol, visto los monos en la playa cuando baja la marea, partidito de voley al atadecer,.... Nos han venido bien unos dias de reflexión y de relax.
La playa es bonita como todas aquí, palmeras en la orilla, agua transparente, y caminando un poco llegas a playas totalmente desiertas. El snorkeling es bastante normalillo, hay corales pero muy desperdigados. Paseando el otro día al atardecer, cuando la marea estaba mas baja, paramos en una playa llena de rocas. Al acercarnos resulto que la gran mayoría eran fósiles de corales y almejas gigantes. Son los fósiles mas grandes que hemos visto jamás, y se contaban por cientos.
Ayer por la tarde el rastas saco a pasear su mascota, un monito al que le falta una pierna. Se lo encontró cuando era un bebe y ahora tiene 3 años. Es súper listo, el mono digo, se te sube, te mira los bolsillos, te busca piojos,... Ah! Y también te muerde pero sin hacerte daño. Estuvimos como 3 horas jugando con el, el mono se quedaba en el regazo de Tania y solamente se quedaba quieto cuando le buscabas piojos. De repente daba un salto y ma trepaba por el brazo, se subía a mi hombro mientras se sujetaba de mi pelo y me mordisqueaba la cabeza. Tania disfrutaba como un niño :)
Hoy mas de lo mismo playa, playa y mono. A Tania le ha cogido tal cariño que hoy han estado un buen rato desparasitandose el uno al otro, como auténticos primates.
Siguiente destino Singapore, al parecer es una ciudad gastronómicamente sorprendente. Espero que sea así porque estamos de arroz hasta la coronilla.
Besos
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